El terror de la plantación Myrtles

Esta legendaria plantación está ubicada en St. Francisville, Louisiana, y es considerada uno de los lugares más embrujados de Estados Unidos. La plantación se estableció aproximadamente en el año de 1796 y fue construida por el General David Bradford, también conocido como “Whiskey Dave”, pues se le relacionó con el conflicto de la prohibición del alcohol.

La ya famosa plantación ha pasado a la historia por ser el lugar donde ocurrieron numerosos actos violentos principalmente contra esclavos, tales como ahorcamientos y asesinatos. Año con año cientos de temerarios visitantes deciden hospedarse en este escalofriante lugar, con la esperanza de ser testigos de alguna experiencia fuera de este mundo.

Se dice que son doce los fantasmas identificados que han infestado el lugar. Uno de esos fantasmas es el espíritu de Chloe, una esclava que, harta de los abusos sexuales de su amo, asesinó en venganza a la dueña de la casa junto a sus dos hijas, poniendo veneno en un pastel que horneó para ellas. Cuando otros esclavos se enteraron de los crímenes, sin dudarlo, apuñalaron a Chloe. Son muchos los que hoy en día han asegurado verla recorrer los pasillos con un turbante verde. Se dice que el llanto de las niñas se escucha cuando Chloe aparece, mientras que algunos de los valientes que se han atrevido a dormir ahí, aseguran que han despertado en medio de la noche siendo observados por la esclava. Otros dicen que durante el intranquilo sueño son molestados por extrañas presencias que intentan tirarlos de la cama, mientras inmóviles, son presas del pánico.

Otro espectro que mora en el lugar es el de William Drew Winter, un abogado que vivió en la casa de 1860 a 1871. La leyenda dice que fue baleado en el porche de la casa, y que herido y dejando un rastro de sangre, intentó subir las escaleras al segundo piso, donde finalmente murió. Sus últimos pasos pueden oírse hoy en día en la tenebrosa plantación.


Los otros espíritus que han hecho de esta antiquísima casa su hogar, son otros esclavos que murieron en Myrtles de causas y formas poco claras; tal vez sean ellos quienes toquen una tétrica melodía en el viejo piano. Otras situaciones difíciles de explicar, son huellas de manos que aparecen en los espejos, objetos que cambian de lugar o que desaparecen, olores desagradables y extrañas fluctuaciones en la temperatura ambiente del lugar.

Muchos escépticos que han accedido a pasar una noche en este sitio han cambiado radicalmente de opinión, y tú, ¿te quedarías en una de sus habitaciones?